CIMARRÓN
En Venezuela, al igual que en las demás colonias españolas y portuguesas en América, hubo cimarrones. Eran estos negros esclavos rebeldes, algunos de ellos fugitivos de las haciendas y llevaban una vida de libertad en rincones apartados de las ciudades o en el campo denominados palenques o quilombos. En Uruguay se les llamó Silantro, en Cuba se adoptó preferiblemente el vocablo jíbaro para referirse a los cimarrones. El término cimarrón no se empleó nunca con los nativos americanos fugitivos.
Puras cimarroneras y a Dios gracias, porque si no, a estas horas también le habrían manoteado esas reses. En Altamira, afortunadamente, desde el 90 para acá, con la soltada de las queseras, todo el ganado se estaba alzando. Las cimarroneras, que de por sí son una ruina, han sido aquí una salvación, porque como dan tanta brega, los mayordomos conchabados con los vecinos, se han contentado con cogerse el ganado manso. Una de estas noches lo voy a llevar al mastrantal de Mata Luzardera para que se dé una idea de la plata que todavía tiene que defender. Pero si se hubiera dilatado en venir unos días más, ni eso habría encontrado, pues ya el don Balbino tenía dispuesto empezar a
darles choques a las cimarroneras para repartirselas con Doña Bárbara. Por algo se ha enredado ella con él". Fin de la cita. En Venezuela la cimarronera se describe muy bien y en extenso con precisión en
http://cuentaelabuelo.blogspot.com/2013/05/el-ganado-cimarron-y-las-cimarroneras-1.html?m=1 que sugiero leer y seguir este blog tan útil para conocer la Venezuela profunda.
Este canto de Altagracia de Orituco, Guárico, es propio de los Cimarrones de la zona:
PARRANDAS DE NEGROS
En Venezuela, al igual que en las demás colonias españolas y portuguesas en América, hubo cimarrones. Eran estos negros esclavos rebeldes, algunos de ellos fugitivos de las haciendas y llevaban una vida de libertad en rincones apartados de las ciudades o en el campo denominados palenques o quilombos. En Uruguay se les llamó Silantro, en Cuba se adoptó preferiblemente el vocablo jíbaro para referirse a los cimarrones. El término cimarrón no se empleó nunca con los nativos americanos fugitivos.
Los "quilombos", "mambices", "cumbes","rochelas" y "ladeiras", fueron otras denominaciones adoptadas por los negros rebeldes. El más famoso palenque del colonialismo latinoamericano fue el "Quilombo de los Palmares", en el Brasil (colonia portuguesa). Tenía una población de unos 15.000 negros esclavos rebeldes y se mantuvo durante casi todo el siglo XVII. Las tropas reales portuguesas usaron 6.000 soldados y les llevó dos años rendirla. Incluso en muchos de esos palenques existieron reyes negros. Por ejemplo: Benkos Biohó, el Rey de Arcabuco, cerca de Cartagena de Indias, en Colombia. En Venezuela, fue famoso el Rey Miguel. En Panamá, el Rey Bayano. En el virreinato del Perú, hubo en Huaura un rey cimarrón a mediados del siglo XVI. El virrey envió una tropa de 120 soldados españoles, que incursionaron violentamente en el palenque, matando a todos sus integrantes.
El “Negro Miguel” encabezó una rebelión de esclavos contra el sistema de explotación establecido por los hacendados y las autoridades peninsulares, en el régimen colonial español.
Desde la llegada de los europeos a Venezuela, se mantuvo una resistencia por parte de la población indígena y posteriormente, entre los siglos XVI y XVII, por parte de la población africana. La brutal explotación española produjo motines, asonadas, rebeldías e insurrecciones de parte de los diferentes grupos étnicos y clases sociales que se generaron dentro del sistema colonial.
Estos movimientos surgieron por causas económicas, políticas y sociales; como el cobro de altos impuestos, la limitación al acceso a altos cargos en la administración colonial, la desigualdad social, la carencia de tierras entre otras; lo que produjo unas profundas expresiones rebeldes entre los esclavos, indígenas y blancos criollos.
En abril de 1552 ocurrió la rebelión del “Negro Miguel”; un esclavo proveniente de África según algunos, aunque otros han sostenido que nació en una población cerca de San Felipe, Yaracuy.
Miguel era un muy respetado entre la esclavitud de las haciendas de café y cacao de la época; había ganado mucha autoridad, porque era reconocido como hijo de reyes, gobernantes de su tierra africana. Los otros esclavos se dirigían a él con veneración y con el título de príncipe.
Los esclavos eran sometidos a brutales condiciones de trabajo y a una existencia de servidumbre perpetua. Agotadoras jornadas de trabajo, de sol a sol era la diaria rutina. Y por cualquier capricho de los amos o caporales eran sometidos a despiadados castigos físicos, privándoseles de alimentos y agua. Más de diez millones de jóvenes africanos fueron capturados por expediciones españolas o portuguesas en sus tierras nativas (África) para traerlos a América a trabajar bajo las órdenes de los capataces.
Miguel, junto con 80 negros esclavos, fue enviado por los españoles a las minas de San Felipe de Buría, cerca de Nirgua. Una noche, cansado de los maltratos, huyó con 20 de sus compañeros y se estableció en las montañas cercanas. Organizado en guerrilla, asaltó la custodia de las minas y liberó a otros esclavos. Logró reunir más de 180 seguidores entre negros y mestizos. Con otros esclavos incorporados, fundó una población fortificada y proclamó una nación con la designación de autoridades entre sus seguidores.
Con la aspiración de extender sus dominios, atacó a Nueva Segovia de Barquisimeto (Lara), pero fue obligado a retirarse por las armas. Después de esta acción, los españoles lo consideraron un peligro y organizaron un ejército con refuerzos de El Tocuyo (Lara). Superiores en número y armamento, los españoles cercaron a Miguel hasta darle muerte. Muchos esclavos huían de las haciendas y se refugiaban en las montañas. Eran llamados “cimarrones” y perseguidos con rencor.
Los primeros esclavos negros fueron introducidos a Venezuela alrededor de 1505 y se intensificó a partir de 1527. Cuando Carlos V, rey de España, contrató a los hermanos (banqueros) alemanes Bartolomé, Lucas, Ulrice y Jacobo Welser para traer cuatro mil negros de África a la provincia de Venezuela. Su propósito era aumentar la productividad del trabajo de los pueblos originarios, cuya población era diezmada por la brutal explotación imperialista.
Los esclavos negros eran cazados en África como animales, en uno de los crímenes más horribles cometidos por las llamadas “civilizaciones Occidentales”. Separados de su tierra, de su hogar, de su familia, desde el mismo momento de su captura eran sujetos con cadenas y conducidos a los barcos negreros, en los cuales los transportaban a América en bodegas inmundas donde muchos morían antes de llegar a su destino. Una vez en Venezuela eran vendidos para trabajar en las haciendas o minas.
Otros levantamientos se produjeron en contra del imperialismo, entre ellos:
1583 - 1586 Cimarroneras de la Goajira- Maracaibo. Negros escapados de sus amos.
1630 Sublevación de negros perleros- Margarita y costas de Cumaná. Levantamiento por las fuertes condiciones de explotación perlera.
1628 Sedición de Nirgua. Solicitan reparto de tierras por haber reducido indígenas.
1653 Cimarrones de Caracas y su jurisdicción. Negros huidos secuestraban a negros del servicio doméstico para unirlos a las cimarroneras. Mataban gente y asaltaban los caminos. Luchaban por la libertad y contra el imperialismo español.
1726 Incursiones en los hatos - Tocuyito. Recuperaban ganado.
1773 Sedición del negro liberto Julián Cayetano y su mujer Juana Inés- Chuao. Reclamo de reconocimiento de una arboledilla trabajada en la Obra Pía. Al no ver reconocido su pago, dirigen ataques a las haciendas.
1785 Rebeliones de negros e indios- Ataque constante a hatos y haciendas en Los Llanos.
1787 Rochelas (alzamientos disturbios) de los Llanos- incluían blancos llamados de orilla. Atacaban las haciendas y grandes hatos.
1790 Cumbe de Caucagua- Caucagua y Curiepe- Ataque a las haciendas y zonas aledañas a ellas
1795 Conspiración de cimarrones- Río Caribe, Carúpano, Cumaná y Cariaco. Enfrentamientos en contra de los esclavistas.
1799 Resistencia de los esclavos de Curiepe- Curiepe. Levantamiento de los esclavos de Don Francisco Javier Longa.
1799 Conspiración de Maracaibo- Maracaibo. Liderada por Francisco Javier Pirela y otros mulatos haitianos. Proclaman la ley de los franceses con la cual obtendrían la libertad y la igualdad, principios de la Revolución francesa
En el capítulo V de la novela "Doña Bárbara", titulado "La Lanza en el muro", Rómulo Gallegos se refiere a las cimarroneras, y en boca de Antonio explica una de sus ventajas, al decirle Antonio Sandoval a Santos Luzardo, cito: " Pero todavía queda (ganado), doctor. Puras cimarroneras y a Dios gracias, porque si no, a estas horas también le habrían manoteado esas reses. En Altamira, afortunadamente, desde el 90 para acá, con la soltada de las queseras, todo el ganado se estaba alzando. Las cimarroneras, que de por sí son una ruina, han sido aquí una salvación, porque como dan tanta brega, los mayordomos conchabados con los vecinos, se han contentado con cogerse el ganado manso. Una de estas noches lo voy a llevar al mastrantal de Mata Luzardera para que se dé una idea de la plata que todavía tiene que defender. Pero si se hubiera dilatado en venir unos días más, ni eso habría encontrado, pues ya el don Balbino tenía dispuesto empezar a
darles choques a las cimarroneras para repartirselas con Doña Bárbara. Por algo se ha enredado ella con él". Fin de la cita. En Venezuela la cimarronera se describe muy bien y en extenso con precisión en
http://cuentaelabuelo.blogspot.com/2013/05/el-ganado-cimarron-y-las-cimarroneras-1.html?m=1 que sugiero leer y seguir este blog tan útil para conocer la Venezuela profunda.
Este canto de Altagracia de Orituco, Guárico, es propio de los Cimarrones de la zona:
PARRANDAS DE NEGROS
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